Asunción – Rusia devolvió al Paraguay 100 toneladas de carne supuestamente contaminada con Estrerichia coli (E.coli), se confirmó ayer, mientras en el Gobierno reinaba preocupación sobre el efecto que puede tener el hecho sobre el segundo rubro de exportación del país.
La carne es el segundo producto de exportación de Paraguay después de la soja, y Rusia es actualmente su principal comprador, con unos u$s 200 millones el año pasado.
La exportación total de carnes, menudencias y subproductos animales de Paraguay alcanzó u$s 930 millones en el último año.
Daniel Rojas, titular del Senacsa, el organismo veterinario del Gobierno paraguayo, dijo ayer que la carga está en territorio argentino, de viaje a Paraguay y que será destruida tan pronto se encuentre en el país.
El funcionario aclaró, sin embargo, que no se recibió aún notificación oficial sobre el incidente de parte de las autoridades rusas.
Se conoció también ayer que el frigorífico responsable de la exportación, Carpe Diem, con instalaciones en una localidad aledaña a Asunción, ya fue sancionado por otros hechos similares.
Entre éstos, el envío de una partida de carne también a Rusia, que fue rechazado por contaminación con salmonella y otro embarque supuestamente contaminado a Egipto, según fuentes ganaderas.
Rojas informó que el frigorífico, propiedad del ciudadano de origen alemán Gerhard Hans Bauser, estaba suspendido desde el 15 de julio último, pero aparentemente la carga rechazada fue despachada con anterioridad.
Oscar Bobadilla, abogado de la empresa, dijo que la carga salió con todos los controles oficiales establecidos, pero que en el trayecto hubo cambios de contenedores y no descartó que la contaminación pudo ocurrir en esas circunstancias.
«La carne se encontró en otro contenedor distinto, sin la precinta del Senacsa», afirmó el letrado.
Empero, el presidente de la Asociación Rural del Paraguay (ARP), Juan Néstor Núñez, no descartó que el mencionado frigorífico tenga alguna protección política para seguir operando luego de las faltas cometidas.
Núñez opinó que el citado establecimiento debe ser clausurado definitivamente.
Luis Pettengil, presidente de la Cámara Paraguaya de Carne, lamentó el incidente y no ocultó su preocupación por el efecto que puede tener sobre el futuro de la comercialización del producto.
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